Arranca el nuevo curso. Y con él, llegan las nuevas caras a fcom. Empiezan la vida universitaria y la carrera que terminarán en 2016. Son fáciles de reconocer: un poco perdidos todavía, llenos de ilusión, con caras de sorpresa y muchas preguntas. Basta con las dos semanas que llevan de curso para darse cuenta de que estudiar Comunicación es algo distinto de cualquier otra carrera. Este año, el Grado en Publicidad y Relaciones Públicas tiene el número más alto de alumnos nuevos, 88; seguido de cerca por los 80 de Periodismo; casi el doble de los 47 matriculados en Comunicación Audiovisual. En los grados dobles, los alumnos suman 29. En total, 244 nuevos estudiantes de los que 89 son de Navarra.
Claudia Anaut. Fotos: M.L.
Creatividad y moda
Entre estos últimos se encuentra Claudia Anaut, quien ha empezado Publicidad y Relaciones Públicas. A punto de matricularse en Periodismo, su pasión por el mundo de la creatividad y la moda le hicieron decidirse. Esta pamplonesa eligió también el International Media Program (IMP) porque en el futuro le gustaría trabajar en alguna agencia fuera de España. De momento está muy contenta con su decisión, con las asignaturas que tiene, y con sus profesores. Aunque todavía se está adaptando, ya es una gran fan de la facultad y su ambiente, y reconoce que le sorprendió ver a tanta gente en las Jornadas de Bienvenida. Tampoco se esperaba la cantidad de alumnos extranjeros que vienen a estudiar a fcom. Este año son 25, de países como Estados Unidos, Colombia, México o Argentina.
Óscar Illinworth.
Cine, arte y viajes
Entre ellos se encuentra Óscar Illinworth, que ha llegado desde Guayaquil (Ecuador) para estudiar Comunicación Audiovisual en el IMP. Este amante del cine, el arte y los viajes, sueña con ser cineasta en Latinoamérica para sacar adelante su cultura. No tiene miedo al futuro porque, aunque sabe que al terminar la carrera el mundo laboral será complicado, cree firmemente que los comunicadores siempre tendrán algo que contar. Cuenta con ilusión que, por primera vez en su vida, está estudiando lo que realmente le apasiona y que, a pesar de estar todavía un poco perdido (cuando sube las escaleras ya no sabe dónde está), la facultad ha superado todas sus expectativas: “fcom le da el alma a la universidad, está en el lugar por donde todo el mundo pasa”.
Carmen Villalonga.
El primer tropezón
Lo mismo le ocurre a Carmen Villalonga. Esta mallorquina vino a ver la universidad porque una amiga se la recomendó y se enamoró del campus y de la facultad. Ahora ha empezado Periodismo y reside en el Colegio Mayor Santa Clara. Le encanta leer, escribir, y su sueño es llegar a ser una buena corresponsal de guerra. Esta extrovertida chica sigue todavía impresionada por la facultad y la inmensidad de sus aulas, (sobre todo la 6, el hogar de los nuevos). Recuerda con gracia cuando llegó tarde a clase, se tropezó con el escalón y se cayó delante de todos los alumnos de primero. Lo que más le ha llamado la atención es la profesionalidad de los profesores, que logran hacer las asignaturas muy llevaderas pero con mucha exigencia. También comenta asustada su primer suspenso en las prácticas de Comunicación Escrita, a pesar de ser su asignatura favorita.
Álvaro Varona y Antonio García.
Compañeros de fatigas
Álvaro Varona y Antonio García son compañeros en Belagua Torre I y en clase. Álvaro es de Bilbao y estudia Publicidad y RRPP con IMP. Es un apasionado de la música (profundo enemigo del ‘reggaeton’) y del marketing. Apostó por fcom porque le gustaría verse el día de mañana presentando algún programa de buena música. Lo que más le gusta de la facultad es el ambiente y la confianza que inspira todo el mundo y, su única queja, es la incomodidad de la sillas. Antonio García es malagueño y está matriculado en el Doble Grado en Historia y Periodismo. Ha dejado la playa de su adorada tierra para aprender a hacer bien lo que más le gusta: hablar. Aspira a llegar a trabajar en algún medio importante de comunicación y eligió hacer la doble carrera para abrirse más puertas. “Hay que tener la espalda cubierta”, opina, aunque prefiere centrarse ahora en los estudios que pensar demasiado en el futuro. De la facultad destaca la disponibilidad de los profesores en cualquier momento y la variedad de gente distinta, con la que, dice, es muy fácil aprender cosas nuevas.
Ana Alba Fernández.
Estudiar y trabajar
Ana Alba Fernández es de Almássera, un pueblo pequeño de Valencia, y ha venido a vivir a la residencia CET Aldunate, que está en el mismo recinto que la Clínica Universidad de Navarra y en la que trabaja para pagarse la estancia. Pese a haber cursado el bachiller de ciencias, eligió Publicidad y RRPP en el último momento. Estos cuatro años espera aprender mucho del mundo de la publicidad y la moda y prepararse bien para formar parte de la empresa de cosméticos de su madre. Lo que le convenció para venir a estudiar a la Universidad de Navarra fue la gran preparación que ofrece para el mundo laboral. Esta chica con ganas de comerse el mundo cuenta que le encanta el olor a hierba mojada del campus por la mañana, la arquitectura de los edificios, el estilo minimalista de fcom, su gente y, sobre todo, sus profesores: “Se nota que les gusta lo que enseñan, y lo saben transmitir”. Ana Alba todavía no conoce a mucha gente y ya se ha perdido varias veces por el campus, pero confía en que pronto se sentirá como en casa y está segura de que estos cuatro años van a ser los mejores de su vida.